Yo tenía un amigo...

Hace ya casi un año que volvió el que suponía que era mi amigo de su trabajo en el extranjero.

Nos costó enteder a Gema y a mí por qué tantas chapuzas, por qué tantas rarezas en la vuelta. Cuando todos queríamos montarle una fiesta de bienvenida lo que hizo él fue esconderse de la gente. Todavía me acuerdo cuando nos preguntábamos si estaría encerrado con su novia echando polvos...

Más adelante, mientras le buscábamos con miedo por lo que le pudiera haber pasado, nos íbamos dando cuenta lo poco que le conocíamos. A medida que búscabamos información para encontrales nos íbamos dando cuenta de cómo era en realidad el que pensábamos que era nuestro amigo.

Pero lo conseguimos, le encontramos, conseguimos verle, tocarle, perdonarle, y por lo visto volver a encontrarnos con sus mentiras, con sus ultranzas, pero esta vez con saña, como les gusta hacerlo a los impresentables, a la mala gente, engañando de la manera más rastrera.

También me acuerdo de discusiones con otros amigos, en las que me ponía de su lado, en la que les pedía que le dieran otra oportunidad o que nos dejaran darla a los que queríamos demostrar que era un amigo que necesitaba ayuda.

¡Cuánta razón teníais! ¿por qué no os haría caso? ¿por qué no nos olvidamos de él cuando todavía estábamos a tiempo de evitar que nos volviera a hacer daño? Es fácil decirlo y poco hacerlo, en realidad lo fácil hubiera sido pasar de él, no hacerle caso y dejar todo estar. Intentamos volver a integrarle en nuestras vidas y una vez más nos falló.

¿Por qué ahora? después de 9 meses sin saber nada de él, el otro día tuve una pesadilla, algo raro porque normalmente no las tengo. Se a´parecía en mis pesadillas y me hacía putadas, me hacía la vida imposible. Cuando me desperté me di cuenta de que así era, sin verle nos ha jodido un poco la vida, nos ha hecho pensar que lo que creíamos era un amigo no era más que un mentiroso que nos engañaba para seguir con su doble vida, para sentirse cerca de la realidad cuando se le iba la pelota, seguro que también para utilizarnos de excusa en muchas de sus mierdas.

Hoy escribo lo que pienso hacer contigo, sé que todavía tienes acceso a mi espacio aunque no sé si lo lees, pero si lo haces quiero decirte que pase lo que pase nunca más quiero saber nada de ti directamente, haré por enterarme cómo te va por ser como soy, de naturaleza cotilla o curioso, pero por nada más. Quiero que te quedes con lo que me debes para que, de por vida, te acuerdes de cómo eres, aunque dudo que pese en tu conciencia. Si te cruzas conmigo te trataré como muchos aquellos con los que nos hemos cruzado después de tiempo y hemos saludado sin más.

No te pienso dar otra oportunidad, no te la mereces. Si lo hiciera seguro que estaría poniendo en peligro mis ideas y a mi familia, hasta ese punto estoy convencido de que eres mala persona.

Hasta nunca "amigo"

0 comentarios: