Paula tiene Papitis

Jamás pensé que iba a decir esto: ESTOY HARTO DE LA PAPITIS DE MI HIJA.

Llevo desde que nació alucinado de cómo quiere Paula a su madre, es una de esas cosas que todo el mundo dice y que parece obvio, pero un padre puede estar todo el día jugando con su hija, cuando llega la madre se acabó el padre.

La verdad es que Gema juega mucho más con la niña, le habla más, le hace mil cariñitos, etc. pero yo no me quedo del todo corto, o por lo menos eso es lo que me gusta pensar, ya le preguntaremos a la niña dentro de unos cuantos años...

Hasta estas Navidades Paula no me hacía demasiado caso, veía a Gema y como loca, se iba Gema y me daba la mañana, no paraba de llorar hasta que volvía, daba igual las veces que te tiraras al suelo a jugar con ella, las veces que la cogieras en brazos, Paula lloraba hasta que llegaba Mamá y a partir de ahí encantadora.

Estas Navidades he pasado más tiempo con ella, cuando estaba la casa llena de gente me ponía a jugar con ella, le he dado mil volteretas y mil cariñitos, la he cogido en brazos hasta que me ha vuelto el dolor de espalda, etc. y lo que he conseguido es que tenga papitis además de mamitis.

Cuando mis suegros, una noche que la dejamos con ellos, me dicen que se puso a llorar al irme no me lo terminaba de creer, además es una sensación de alegría y pena al mismo tiempo, qué pena da que la niña se quede llorando, casi prefiero que esté bien con todo el mundo, pero por otro lado, ¡¡¡¡qué bien que quiera tanto a su papi!!!!

Desde ese momento me he ido dando cuenta de que tener una niña "mimada" o con "papitis" o como lo quieras llamar no es muy gracioso. Ahora todas las mañanas, cuando me ve se sonríe y esa sonrisa picarona quiere decir que o me coges en brazos y no me sueltas o voy a estar toda la mañana llorando, si me sacas del parquecito correré detrás tuyo y me cogeré a tus pantalones llorando hasta que me cojas, si te sientas delante del PC me pondré a llorar agarrada a la silla hasta que me subas a mi también y pueda escribir al mismo tiempo que tú.

Aún así, sigue siendo una gozada, ¡¡cómo quiere a su padre Paulita!! jamás hubiera pensado tener esta sensación, jamás, ahora eso si, con mucho, mucho dolor de espalda :-)

0 comentarios: